enero 16, 2010

LA HISTORIA DE HAITI

CATACLISMOLos historiadores hablan sobre la tragedia
Melbin Gómez - 1/16/2010DEJE SU COMENTARIO




EN 1842 UN TERREMOTO DESTRUYÓ LAS POBLACIONES HAITIANAS DE GONAIVES, SAN MARCOS, PORT DE PAIX Y GUARICO Y EN RD AFECTÓ A SANTIAGO Y LA VEGA

Rostros. El dolor se transforma en asombro y el asombro en llanto y el llanto en incertidumbre.
Santo Domingo.- Con miradas desolantes y rostros llenos de lágrimas, miraban el cuerpo de uno de sus familiares en el lecho de su muerte. Eran, nada más y nada menos que una mujer atrapada debajo de un bloque de cemento en Pention Ville, Haití, luego del terremoto de 7 grados en la escala de Richter que azotó ese país al pasado martes en horas de la tarde.

Eso ocurre en el país más pobre del hemisferio occidental donde un siniestro natural dejó a su pueblo sin casas, edificios, escuelas, hospitales y palacios, un pueblo que hoy vive en estado de desilusión.

Ante la desgracia, dos reputados intelectuales dominicanos traen su voz solidaria y sus reflexiones.

La indefensión colectiva
Para el historiador y director del Archivo General de la Nación (AGN), Roberto Cassá, lo que se puede ver tras esta tragedia es una correlación del estado de pobreza de Haití con la defensa ante estos fenómenos naturales.

“El caso de un fenómeno de esta naturaleza arroja muchas víctimas, pero seguramente en Haití arroja más debido a circunstancias como el tipo de construcción de numerosas viviendas a pesar de que no se puede generalizar en todos los casos”, explicó Cassá, quien además es autor, entre otros, del libro “Historia Social y Económica de la República Dominicana, Modos de producción, clases sociales y luchas políticas”.

Haití fue el segundo país americano en declarar su independencia, en el año 1804, luego de Estados Unidos y el primer Estado negro en la región en lograrla, durante su historia ha tenido varias dictaduras que le han dejado mal sabor, como la más reciente de los Duvalier.

En cuanto al comportamiento de la República Dominicana ante la presente crisis, el historiador lo considera como correcto e indica a la vez que “es una cuestión de deber moral de la comunidad dominicana proceder a ejercer esa solidaridad y que esa solidaridad además trascienda el momento del sismo y de las consecuencias inmediatas por más devastadoras que son”.

Nuestro país comparte con Haití la isla de Santo Domingo en unos 77,914 km, y según datos del informe de la población mundial 2009 del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), la esperanza de vida al nacer de un niño en Haití es de 59.7 años, cuando la esperanza de vida de un niño al nacer en nuestro país es de 70 años.

En la historia de ambos países ocurrió también un fenómeno de esta naturaleza el 7 de mayo de 1842 cuando se sintió en toda la isla un violento terremoto que redujo a escombros las poblaciones haitianas de Gonaives, San Marcos, Port de Paix y Guarico y en República Dominicana afectó a Santiago de los Caballeros y La Vega.

Otra opinión
El historiador Rafael Darío Herrera, considera que este sismo es una catástrofe que no solamente va a requerir el apoyo del pueblo dominicano sino también el apoyo de las grandes potencias muchas de ellas ligadas históricamente a Haití como el caso de Francia, Canadá y otras.

Explica que si se hace un recuento de los hechos históricos desde la Guerra de la Restauración (1863) hasta hoy ha habido un proceso mutuo de solidaridad entre haitianos y dominicanos entre ambos pueblos.

“Ante un hecho catastrófico como el que está ocurriendo en este momento es natural que se sienta pesar, que se sienta tristeza y que además se manifieste de muchas maneras ese sentimiento de solidaridad con el pueblo haitiano”, reitera.

Considera que Haití es un país que ha padecido una crisis de dirección y que no hay grupos capaces de asumir la dirección o de unificar los diferentes sectores que inciden en dicha sociedad.

Sobre la destrucción de varias edificaciones gubernamentales Herrera dice que: “La caída, la destrucción del palacio simboliza un mal desplome de lo que es el Estado haitiano que es un Estado con un nivel de institucionalización muy bajo”.

EL FUNCIONAMIENTO INSTITUCIONAL
Roberto Cassá explica que dado el hecho de que varias de las instituciones rectoras del vecino país se han quedado prácticamente en suspenso de su funcionamiento hasta tanto se reorganicen en nuevos lugares, genera una manifiesta desorganización general que puede repercutir en el funcionamiento del Estado haitiano y de manera general.

Herrera plantea la problemática haitiana desde la época de las colonias, cuando era la nación más rica. A su criterio, desde ese momento comenzó la destrucción de los recursos naturales, y que luego vinieron las dictaduras y el narcotráfico.

Visualiza un futuro bastante oscuro para el vecino país y asegura que de no contarse con el apoyo de los grandes países capitalistas la República Dominicana va a sufrir esa crisis dado a que tenemos una frontera muy frágil.

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